Una solución de desalinización del océano sostenible
Mientras se encontraba de viaje en Córcega, Dragan Tutic, cofundador de la empresa canadiense Oneka Technologies, tuvo la idea de crear una tecnología ecorresponsable y barata que aprovechara el movimiento de las olas para desalinizar el agua de mar y producir agua apta para el consumo humano.
Para Oneka –que significa agua en mohawk–, el planteamiento era simple: utilizar el océano, que posee tanto los recursos como la energía. La energía del océano es inmensa, solo es necesario capturarla.
El océano, una fuente de agua dulce sostenible, accesible y asequible
Para ello, la empresa diseñó un pequeño dispositivo de desalinización fabricado a partir de 170 000 botellas de plástico recicladas: se trata de un sistema modular flotante y autónomo que utiliza la energía mecánica de las olas para desalinizar el agua y bombearla hasta la orilla. Ancladas al fondo del océano, las boyas Oneka flotan en la superficie, a una distancia de entre 500 m y 1,5 km de la costa, en cualquier lugar donde la altura media de las olas sea superior a 1 m (aprox. 3 pies). El movimiento oscilante de las olas se utiliza para accionar una bomba de agua lineal. La ascensión de la boya presuriza el agua y la impulsa hacia la planta de tratamiento que la filtra y la desaliniza mediante un proceso de ósmosis inversa, y la energía es recuperada antes de devolverla al mar. También gracias a la energía de las olas, se impulsa el agua dulce y potable hasta la orilla a través de una tubería submarina de polietileno de alta densidad que se encuentra anclada al fondo. Finalmente, el agua puede ser almacenada o distribuida según sea necesario. La salmuera vertida por estas boyas tiene un impacto insignificante para la fauna y la flora marinas porque su concentración salina solo es ligeramente superior (en un 30 %) a la del océano, y además es dispersada por cada unidad de manera individual.
Una solución libre de carburantes, electricidad y emisiones de CO2
Las unidades de la clase Iceberg están diseñadas para producir de 30 a 50 metros cúbicos (8000 - 13 000 galones) de agua al día, esto es, el volumen suficiente para satisfacer las necesidades diarias de entre 100 y 1500 personas, según su estilo de vida y consumo. Unos sensores instalados a bordo, alimentados por pequeños paneles solares, analizan continuamente el agua producida y se aseguran de que cumpla la normativa vigente. Oneka propone un postratamiento para ajustar el sabor del agua o para adaptarlo a las necesidades de los agricultores.
Democratizar el acceso al agua potable
Esta solución, a diferencia de los sistemas tradicionales de desalinización alimentados con gas y electricidad, no emiten cantidades significativas de gases de efecto invernadero. Cada boya de la clase Iceberg representa un ahorro de aproximadamente 100 000 kg de CO2 al año. Este sistema modular y adaptable permite ajustar el número de boyas en función de las necesidades del cliente. Sencillo y con un coste energético y medioambiental reducido, el sistema Oneka se fabrica en 3 tamaños distintos. El más pequeño de ellos ha sido diseñado para responder con rapidez ante situaciones de desastre y proporcionar a las poblaciones afectadas el equivalente a 2000 botellas de agua al día.
Hace algunos meses, Oneka Technologies recibió una subvención de 729 000 USD por su tecnología de desalinización Snowflake al serle otorgado el principal premio Waves to Water del Departmento de Energía (DOE) estadounidense. Este concurso pretende acelerar el desarrollo de sistemas que utilicen la energía marina generada por la fuerza de las olas con el objetivo final de responder a las necesidades de agua potable de las comunidades costeras remotas así como de las poblaciones afectadas por desastres naturales o fluctuaciones climáticas extremas.
Mas información :
https://www.onekawater.com