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GreenLine, un parque infantil eficiente y respetuoso con el medioambiente

En 1970, el escultor danés Tom Lindhardt y Hans Mogens Fenne-Frederiksen fundaron Kompan, una empresa dedicada a la creación de parques infantiles. En una época de intensa urbanización, en la que cada vez más mujeres se incorporaban al mercado laboral, su objetivo era crear soluciones innovadoras, lúdicas, únicas e intemporales que contribuyeran al desarrollo de los niños.
GreenLine, un parque infantil eficiente y respetuoso con el medioambiente
GreenLine, un parque infantil eficiente y respetuoso con el medioambiente

Paralelamente, Kompan siempre se preocupó por el medioambiente en el diseño de sus estructuras de juego. Prueba de ello es la creación, en 2014, de Ecocore, un panel de estructura fabricado al 100 % con materiales reciclados y además reciclables al final de su vida útil.

Un impacto positivo en los niños y en el medioambiente

Medio siglo después de su creación, Kompan se ha convertido en el líder mundial en el sector de los parques infantiles y las instalaciones para practicar ejercicio físico al aire libre, rodeándose de expertos en el ámbito de la infancia, la arquitectura y la sociología, entre otros. Aunque su esencia sigue siendo la misma —crear parques infantiles al aire libre que sean atractivos, de diseño, de calidad e intergeneracionales—, sus decisiones ecorresponsables se han elevado a un nivel superior. Con el objetivo de reducir el uso de materias primas vírgenes, la empresa ha optado por fabricar su última gama de juegos al aire libre utilizando residuos marinos y/o plásticos reciclados, unas materias primas más sostenibles, para reducir las emisiones de carbono. Una solución circular que permite dar una nueva vida a los residuos y que podrá ser reciclada nuevamente después de su desmantelamiento.

Estos materiales innovadores, que previamente han sido objeto de investigaciones y pruebas exhaustivas, ofrecen las mismas cualidades de resistencia a los rayos ultravioleta, a la intemperie, a los golpes y al uso intensivo por parte de los niños, que los materiales tradicionales.

Hacer un buen uso de los residuos

Los postes de acero tradicionalmente utilizados en los parques infantiles se han sustituido por postes textiles, fabricados a partir de residuos textiles posconsumo y bolsas de plástico que ya no tienen valor y no pueden ser recicladas. El material textil se trata y se mezcla con el plástico reciclado para dar lugar a un poste sostenible, con una reducción del 82 % en las emisiones de carbono por kilogramo.

Los puentes y plataformas de escalada de los parques infantiles se fabrican con un 75 % de residuos plásticos marinos recuperados del océano, mientras que los paneles de juego están compuestos o bien al 100 % de residuos de envases alimentarios posconsumo o bien al 100 % de residuos plásticos marinos. Estos residuos plásticos procedentes del océano también se utilizarán en un 25 % en la composición de los accesorios rotomoldeados.

Los parques GreenLine de Kompan de bajas emisiones de carbono han ganado el premio australiano Good Design Award 2022.

Mas información:
​​​​​​​https://www.kompan.com

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