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Una fachada multimedia luminosa de energía cero para el Pabellón de Novartis

La ciudad de Basilea (Suiza) aloja un peculiar edificio con forma de yurta. Lugar de encuentro dedicado a las ciencias farmacéuticas, el Pabellón de Novartis se distingue por su arquitectura innovadora y, en especial, por su fachada multimedia luminosa, creada para magnificar el edificio utilizando una tecnología 100 % autónoma energéticamente que se alimenta con la luz del sol.
Una fachada multimedia luminosa de energía cero para el Pabellón de Novartis
Una fachada multimedia luminosa de energía cero para el Pabellón de Novartis

Fue en este campus situado a orillas del Rin donde el gigante farmacéutico Norvatis inauguró el pasado mes de abril su último proyecto: un lugar de encuentro y aprendizaje que pretende mostrar las maravillas de la ciencia y la medicina al público general.
El despacho milanés AMDL CIRCLE y el diseñador italiano Michele De Lucchi, artífices del proyecto, idearon el edificio con un enfoque futurista y sostenible, tanto a nivel de diseño como de concepción. Pero lo que hace de este un edificio único es su fachada luminosa de energía cero que, todos los días, a la hora de la puesta del sol, se transforma durante 30 minutos en un verdadero espectáculo de obras de arte digitales, pensadas expresamente para el emplazamiento.

Una solución de energía solar inteligente

Responsable de la concepción, el desarrollo y la puesta en marcha del conjunto de la fachada, iart, un estudio suizo dedicado a la arquitectura multimedia, se ha asociado con Asca, un fabricante francés de películas fotovoltaicas orgánicas (OPV, por sus siglas en inglés). Su solución solar, fruto de varios años de I+D, permite que cualquier superficie se convierta en energéticamente activa, sea cual sea su forma o material. Para ello, se imprimen unas células fotoactivas compuestas por polímeros basados en la química orgánica sobre películas de PET flexibles. Las distintas capas que componen la película se recubren de forma continua mediante un procedimiento de recubrimiento «rollo a rollo» a gran velocidad, combinando etapas de revestimiento y de estructurado láser, y a continuación son encapsuladas dentro de una película de barrera. De este modo, Asca produce módulos solares flexibles, ultraligeros y adaptados a cada caso en particular.
Para el proyecto Novartis, Asca desarrolló y fabricó más de 10 000 módulos con formas romboidales y triangulares de 10 tamaños distintos. Integrados dentro del policarbonato, se diseñaron para que se ajustaran perfectamente a los 1333 m2 de curvas de la estructura circular.

Una segunda piel pluridimensional

La malla solar alimenta más de 30 000 ledes que difunden obras creadas por artistas inspirándose en la ciencia y la innovación. La luz de los ledes se refleja sobre el caparazón metálico de la fachada que a su vez reenvía como un espejo los rayos luminosos hacia los módulos de ASCA®. Estos últimos, al ser transparentes, dejan que la luz brille hacia el exterior permitiendo así que los juegos de luces tomen vida. Extremadamente sensibles a la luz, estos módulos de diseño a medida producen energía a partir de la luz procedente de todas las direcciones, y lo hacen incluso en condiciones de baja luminosidad. De este modo se maximiza la producción a lo largo de todo el día, desde que sale el sol hasta que se pone.
 «Esta fachada multimedia es un fantástico ejemplo de integración de energía renovable en el edificio sin sacrificar los aspectos arquitectónicos. Estamos convencidos de que nuestra tecnología a medida reinventa la arquitectura y representa no solo el presente sino también el futuro de la fachada solar», comenta Hermann Issa, Vicepresidente Primero de Desarrollo Empresarial y Gestión de Proyectos de Asca.

Un edificio seguro gracias a la fabricación aditiva y a los materiales innovadores

Finalmente, con el fin de prevenir cualquier riesgo eléctrico o problema de compresión del cableado, se han fabricado 16 000 «guías de cable» a medida mediante impresión 3D que posteriormente se han incorporado a las cubiertas de protección eléctrica de los módulos OPV. Estas piezas están hechas de Kimya PETG-S, un filamento polimérico de la familia de los poliésteres saturados, seleccionado por su gran resistencia a las temperaturas y sus cualidades hidrófobas. Es el material ideal para las condiciones meteorológicas inherentes a un proyecto para la fachada de un edificio.

Mas información:
www.asca.com

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