Copa del Mundo 2018: los plásticos aceleran el juego
El balón de fútbol fabricado a partir de fuentes renovables, las suelas de resina Pebax, la capacidad de agarre de los balones para los porteros y mucho más: los polímeros son inevitables en el fútbol. Se encuentran en toda la gama de equipamientos destinados tanto a profesionales como a aficionados.
Los polímeros dominan el balón
Se ha convertido prácticamente en una mascota: cada cuatro años, en cada Copa del Mundo, la FIFA selecciona y propone un nuevo balón. Puede que parezca insignificante, pero cada vez es una pequeña revolución que prende fuego al mundo del fútbol, ya que todavía ninguno de esos balones ha logrado satisfacer a todo el mundo. Naturalmente, la polémica no está en su aspecto sino en su comportamiento en el aire o cuando rebota, lo cual depende totalmente de los materiales utilizados y de su técnica de fabricación. Como bien sabemos, un balón de fútbol se compone de diferentes partes, por lo que no es una esfera perfecta. No obstante, ya quedan lejos los viejos balones de cuero, pesados e impredecibles. Hace unos cuarenta años, el simple balón se convirtió en un objeto de alta tecnología tanto por su forma como por los materiales utilizados para su fabricación.
Los plásticos en plena forma
La primera evolución tuvo lugar a principios de los años 70 con el Telstar, el balón fabricado por Adidas para el Mundial de México. Una veintena de partes, llamadas caras, hechas de cuero y cosidas entre sí, crearon una forma que se haría famosa: el icosaedro truncado. El primer balón icosaédrico, el Telstar, se acerca a la forma de una esfera. Sus colores blanco y negro no fueron seleccionados al azar. Fueron elegidos para que el balón fuera más visible en los televisores en blanco y negro que todavía se usaban por entonces. De hecho, de ahí surgió su nombre, ya que Telstar es la abreviatura de "Television Star" El único problema que tenía era que las costuras solían desgarrarse bruscamente debido a la dureza del cuero.
En ese momento, los fabricantes empezaron a investigar el uso de plásticos como posible sustituto del cuero usado en la fabricación de los balones. Encontraron que estos eran más maleables, más elásticos, más resistentes y menos costosos. El poliuretano, un polímero muy fuerte que se adhiere fácilmente, les llamó la atención. ¡Esto iba a ser una verdadera revolución! La finura del polímero y la mayor precisión en el corte (de milímetros a micras) permitió a los ingenieros aproximarse más a la forma de una esfera en el diseño de los balones. No obstante, el poliuretano no sustituyó oficialmente al cuero hasta el año 1986. El número de caras también cambió: de treinta y dos caras en los años 1930 a veinte en 1970 y tan solo seis en la última Copa del Mundo. Dado que no tiene ninguna irregularidad en su superficie, el balón rueda y flota mejor. Otra ventaja del polímero es que recupera instantáneamente su forma después de un golpe, no importa cuán fuerte sea. Y gracias al pegamento, una dispersión acuosa de poliuretano, el balón es perfectamente estanco y no se hace más pesado ni siquiera cuando está empapado por la lluvia.
Los procesos de fabricación y los materiales utilizados para fabricar los balones han cambiado enormemente desde el primer Mundial de Fútbol que tuvo lugar en la década de 1930. |
Telstar 18, Copa del Mundo 2018: el primer balón de fútbol fabricado con plásticos de origen biológico, como el EPDM. |
El balón de fútbol Telstar 18 opta por lo verdeLos aficionados al fútbol ya habrán pillado la referencia. El balón seleccionado para el Mundial de Rusia tiene algunas similitudes con el emblemático balón Telstar de 1970. Un bonito homenaje al balón que cambió el juego. Sin embargo, el parecido es solo superficial, y a pesar de ello el Telstar18 (el nombre actual del balón) también supone un progreso tecnológico significativo. La forma de las caras ha cambiado, pero eso no es lo más importante. La verdadera innovación radica en el polímero utilizado: Kelkan Eco, un plástico de origen biológico desarrollado por Arlanxeo, una empresa conjunta entre el grupo alemán Lanxess y el fabricante saudí de productos químicos Sauri Aramco, especializado en elastómeros. |
Por su elasticidad, resistencia (su habilidad para recuperar su forma) y fuerza, Adidas, el fabricante del balón, seleccionó un material llamado EPDM, un elastómero de origen biológico hecho de etileno derivado de la caña de azúcar. Como siempre, este nuevo balón es objeto de muchos comentarios en el mundo del fútbol. Su óptimo rendimiento de rebote y su "flotabilidad" deberían acelerar el juego y llevar a más goles, lo cual no es del agrado de todos los porteros. ¿Cuáles serán los resultados en la práctica? Tendremos que esperar hasta el final del Mundial para poder sacar conclusiones.
Los polímeros al rescate
Más potente, flota más… el nuevo balón será sin duda una preocupación adicional para los porteros que, al estar especialmente expuestos, tienen que protegerse para evitar lesiones. Un balón de fútbol puede alcanzar velocidades de 120 km/h (es decir, un peso de 180 kg) durante los tiros de penalti. Huelga decir que estos porteros necesitan músculos de Kevlar para evitar lesiones. Tienen su propio equipo especial, que no solo se diferencia por su color. En primer lugar, tienen guantes especiales. Para los aficionados, y posiblemente también para los profesionales, elegir el guante adecuado es todo un reto dada la gran cantidad de modelos disponibles: una gama se adapta a la humedad (lo cual tiene sentido ya que el balón es muy resbaladizo cuando llueve) y otras se adaptan a diferentes tipos de terreno de juego (lo que también tiene sentido porque el balón se comportará de forma diferente).
¿Cuáles son los polímeros que se utilizan para el agarre en los guantes de los porteros? Un secreto bien guardado… |
En términos generales, un guante debe permitir agarrar el balón, pero también debe absorber los impactos. Por último, tampoco debe estorbar los movimientos del portero. Por ello, los guantes combinan diferentes materiales. Están hechos de varios polímeros como el poliuretano, el poliéster, la poliamida y los elastómeros como el elastano o el látex natural. Al respecto, no se sabe mucho más, ya que existe una competencia feroz en este campo y cada fabricante tiene su propia receta. Lo que sabemos con certeza es que el secreto de un buen guante es la capacidad del material para agarrar el balón, la cual depende de la naturaleza del polímero utilizado. Solo sabemos que el polímero que se utiliza para fabricar esos materiales está enriquecido con adhesivos. Las barras individuales que sobresalen de la parte posterior de los guantes para que el jugador pueda devolver la pelota con un puñetazo se fabrican, en la mayoría de los casos, con poliuretano debido a su capacidad para absorber y resistir los impactos. El mismo material cubre las camisetas de los porteros para proteger el pecho y los codos.
Los zapatos de fútbol están fabricados íntegramente con polímeros (malla, elastómeros, etc.) |
Los plásticos se ponen de pieElegir un guante puede ser todo un reto, ¡pero eso no es nada comparado con el calzado! También hay modelos para todos los gustos o más bien para todos los tipos de jugadores: botas ultraligeras para los delanteros que necesitan correr lo más rápido posible con el balón en los pies para marcar; botas reforzadas para los defensas que deben interceptar los balones rápidos o robar el balón a los contrincantes y, por último, botas técnicas para los centrocampistas que necesitan hacer pases con precisión quirúrgica. |
En resumen, ¡todo un quebradero de cabeza para los jugadores principiantes que intentan comprar su primer par! Es difícil imaginar la cantidad de investigación, tecnología y pruebas que se realizan para fabricar este calzado al que se pide combinaciones de propiedades que no siempre son compatibles. Sin embargo, las botas modernas tienen muchos puntos en común, independientemente del tipo de jugador al que estén destinadas. En primer lugar, sin ofender a los fans de Pelé, Cruyff y compañía, en las botas actuales casi no se utiliza cuero. La parte superior de los modelos de gama alta está hecha de un material de malla. Este material transpirable se diseñó inicialmente para corredores de maratón y, posteriormente, al demostrar una resistencia satisfactoria, se adaptó a las botas de fútbol estrechando un poco la malla. De hecho, la malla es una fibra de poliéster en una matriz de poliuretano. Gracias a esta malla, una bota puede pesar menos de 200 g, incluidos los tacos. Además, la malla es hidrofóbica: la bota no se hace más pesada aunque esté mojada por la lluvia.
El fabricante alemán Adidas llegó a los titulares con el lanzamiento del primer zapato sin cordones en 2014. ¿Una estratagema de mercadotecnia? No solo eso, ya que los técnicos de la marca descubrieron que los cordones y los ojales pueden provocar la pérdida del control del balón. Por lo tanto, mejoraron la malla dándole una mayor elasticidad con el objetivo de proporcionar la máxima sujeción para el pie. Las zonas con las que se golpea el balón se reforzaron con una versión aún más ajustada del mismo tejido.
Las suelas muerden el suelo
Las suelas de resina de Pebax se encuentran ahora en las mejores botas de fútbol. |
Las suelas también tuvieron su cuota de protagonismo. Los modelos de gama media suelen tener suelas de poliuretano, a veces reforzadas con plantillas de fibra de carbono. Sin embargo, la verdadera revolución la creó el fabricante francés Arkema, que desarrolló la resina Pebax, un elastómero de alto rendimiento que se adoptó instantáneamente por las principales empresas fabricantes de equipamiento deportivo. Este polímero, que con el tiempo se ha ido mejorando, es ligero, elástico, flexible, fuerte y activo, ya que es capaz de restaurar la energía en el momento de golpear. De hecho, se trata de una mezcla de poliamida para conseguir mayor rigidez y de poliéster ganar más flexibilidad. Desafortunadamente, eso es todo lo que sabemos del material ya que quienes tienen la receta para tan exitoso producto se muestran comprensiblemente reacios a compartirla. Actualmente, ¡más del 50 % de los jugadores seleccionados para el Mundial tienen zapatos con suela de resina Pebax, y el 80 % de los goles marcados durante el Mundial en Brasil fueron Pebax Powered®!
Dado que son un elemento esencial de las botas, los tacos se moldean al mismo tiempo que la suela, siempre que ésta sea de poliuretano. Este no es el caso de la suela de resina de Pebax, ya que el polímero se considera demasiado flexible para moldear dichos tacos. En este último caso, los tacos se moldean con un poliuretano seleccionado por su excelente resistencia a la abrasión. Luego se encolan a las suelas. La principal ventaja de estos tacos radica en su moldeado. Los polímeros son conocidos por su capacidad para adoptar todas las formas. Los tacos tenían originalmente forma cónica, y ahora es posible encontrar tacos triangulares, de hoja o con forma de coma. ¿Por qué tanta variedad? Porque, aunque los tacos deben, en primer lugar, asegurar un buen agarre en el terreno de juego – lo que los tacos cónicos hacen muy bien –, no deben estorbar a los jugadores, cosa que no hacen tan bien. La cuestión estriba en el diferente equilibrio que se necesita en función del tipo de juego (correr, acelerar, hacer regates, etc.); los tacos que se hunden demasiado en el terreno de juego durante el regate harán que el jugador pierda el balón o sufra un esguince de tobillo. Así, algunos tacos sirven para agarrar, otros para estabilizar, otros para orientar el pie. Todo ello porque los polímeros son fáciles de moldear y tienen una cierta elasticidad que resulta útil para mejorar sus prestaciones.